Durante este segundo trimestre, en el primer tramo de Educación Primaria, hemos leído el cuento “El hombrecillo de papel” de Fernando Alonso, dentro del recurso del programa de Educación Responsable, Lectura, emociones y creatividad. A través de esta lectura hemos ido trabajando con el alumnado la identificación y la gestión de diferentes emociones.
En una primera fase vimos cómo la protagonista de nuestro cuento se aburría y no sabía a qué jugar, por lo que inventaba diferentes juegos. Con creatividad e imaginación, hizo diversas figuras con papel de periódico. Así, nuestros alumnos y alumnas pudieron reflexionar sobre qué suelen hacer cuando están aburridos, cómo pasan el tiempo y qué otras actividades o juegos pueden inventar para entretenerse. Gran parte del alumnado se sintió identificado con la niña, lo que dio paso a que hablaran y compartieran con el resto de sus compañeros y compañeras ejemplos de juguetes que tienen en casa y con los que suelen jugar. Además, como la protagonista, también hicimos un sombrero de papel usando la técnica de papiroflexia.
A continuación, conforme avanzamos en la lectura, fuimos analizando
los sentimientos de cada uno de los personajes del cuento, la alegría durante
el juego, la tristeza cuando “el hombrecillo” contaba las historias que tenía
escritas…y reflexionamos sobre cada una de ellas con la realización de diversas
actividades.
Esta segunda parte terminó con una actividad que encantó al alumnado. Al igual que “el hombrecillo de papel”, nosotros metimos en la lavadora todo aquello que nos entristecía. Tras una breve reflexión, el alumnado escribió en un papel aquellas cosas que le hacían sentir tristes (una situación, un momento en su vida, una frase, una palabra…) y, uno a uno, fueron metiendo en la lavadora lo que habían escrito. ¡No os podéis imaginar cuál fue nuestra sorpresa! Pasado un tiempo, la lavadora había hecho su trabajo y había limpiado todo aquello que nos hacía sentir mal.
Para finalizar con la lectura, fuimos observando la transformación de nuestro personaje protagonista, quien, una vez limpio de todo lo que le hacía sentir mal, se iba llenando de todas esas cosas buenas que le rodean y que le hacen sentir bien, los sonidos de la naturaleza, los colores, las buenas palabras…y cambió aquellas noticias tristes que hacían llorar a los niños por noticias buenas, de personas que ayudaban a los demás y hacían de este un mundo mejor, de las cosas que nos rodean y que nos hacen sentir bien, y así, cuando se las contó a sus amigos, estos fueron felices. Como actividad final, nuestro alumnado también creó su “mural de las buenas noticias” y, por último, usando diversos materiales, crearon su propio “hombrecillo de papel”.
Además de trabajar las diferentes emociones, con esta lectura
hemos trabajado otros aspectos del currículo, tales como la expresión oral, con
actividades realizadas de forma oral en las que el alumnado tenía que
identificar y explicar diferentes aspectos relacionados con la lectura, y la
comprensión y la expresión escrita, a través de actividades de seguimiento de instrucciones,
de análisis e identificación de diferentes tipos de publicaciones, de
comprensión escrita a través del dibujo, de decodificación de mensajes, de
escritura creativa y un resumen del cuento, entre otras.
Precioso
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