Los niños y niñas de 5 años al acabar la sesión de
psicomotricidad han vuelto a la calma poniendo atención plena en cada una de
las partes de su cuerpo. Sentados y tranquilos frotamos las manos con una
esponja, el pelo, cara, orejas, cuello, manos, dedo por dedo, los brazos,
hombros, tronco, espalda, piernas y pies.
¿Qué pretendemos con ello? Que se puedan divertir
disfrutando de lo que están haciendo, del momento, que mejoren su capacidad de
atención, concentración y escucha, y que tras observar su respiración, como
entra el aire por la nariz y sale por la boca, puedan obtener momentos de calma
y relajación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario