Se desarrolla de la siguiente manera:
- Cada niño coloca su nombre en la parte inferior de un folio en blanco y realiza el primer pliegue
- Se pasa el folio al compañero. Debe explicar una cualidad SIEMPRE POSITIVA del alumno inicial y realiza otro pliegue, de manera que no se vea lo que ha escrito.
- Se pasa a otro compañero y realiza lo mismo. El pliegue será al inverso que el anterior, de modo que no se ve lo que ha escrito el compañero anterior, y el siguiente tampoco ve lo que ha escrito el último.
- Cuando haya pasado por todos los compañeros, se cierra el abanico. No podrá leer el abanico hasta llegar a casa.
Se sorprenderá y se mejorará la autoestima del niño, así como cohesión con el resto del grupo al conocer tantos aspectos positivos, donde en algunos casos, no son conscientes ni ellos mismos.
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