El abrazo es una muestra o expresión
de afecto que nos reconforta, nos tranquiliza,…, más que nada es un intercambio
afectivo.
Cuando estos niños del aula de 5 años
empezaron su escolaridad nos encontrábamos en el primer curso post-
confinamiento. Las medidas anticovid, aunque en infantil no eran muy extremas
por considerarse una clase burbuja sí que nos impedían poder dar abrazos…por
ello, todos los días en las rutinas de entrada al aula nos dábamos con gestos “
un abrazo grande virtual”.
Este curso se han terminado las
medidas anticovid pero “se nos olvidó” este tema de los abrazos. Y un día de
estos, estando María, maestra de audición y lenguaje, en nuestra clase, Pascual,
nuestro alumno, pidió si podíamos darnos un abrazo. Fue así como la sesión programada cambió. María propuso que cada uno
de los niños y niñas le diera un abrazo a quien quisiera y así fueron haciendo.
Posteriormente pidió que se colocaran
por parejas y se miraran a los ojos, durante un minuto. Al terminar les dijo
que podían abrazarse o lo que les surgiera, o no hacer nada. Solo una pareja no
se abrazó.
Para terminar nos dimos un fuerte
abrazo todos juntos.
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